Un amor callado.

 ~PROFESOR Y ESTUDIANTE~

Un profesor de 28 años que trabaja en una secundaria como profesor de matemáticas. Él tenía alrededor de 35 estudiantes, los cuales odiaban matemáticas. En realidad, matemáticas es la asignatura menos querida.

Había una chica la cual era la excepción, ella todo lo contrario a ellos; amaba las matemáticas. Siempre era la más destacada en su clase y se fue ganando el respeto, la admiración y el respeto del profesor,

Ella era una joven de 16 años y su sueño era ser profesora de matemáticas. Resolvía sin dificultad todos los problemas presentados en esa asignatura. Había ganado un reconocimiento.

A ella le gustaba el profesor de matemática y él se dio cuenta, porque ella se quedaba mirándolo fijamente. Ella era un poco tímida.

Un día el profesor la llamó para que le ayudara (si podía) a corregir unos exámenes de matemática. El primero que revisó fue el de ella y ella sacó un 10, por eso la llamó para que le ayudara. Ella aceptó ayudarlo y toda la tarde estuvo callada y sólo se concentraba en lo que él le decía. Cuando terminaron de revisar todos los exámenes y ella se iba a retirar se le cayó su mochila y él y ella al mismo tiempo se bajaron a cogerla. Se quedaron mirándose y él le dio un beso en la frente como agradecimiento.

El profesor era un un hombre muy guapo y elegante, sólo tenía 28 años, pero era un sueño imposible para ella.

El profesor mandó a llamar a los padres de ella para hablarles sobre como era su hija en su hora y les felicitó tanto a ellos como a ella. Él y los padres de ella se cayeron bien y con el tiempo se convirtieron en amigos.

Luego ella terminó la secundaria e iba a realizar su carrera como profesora de matemática en una Universidad cerca de su antiguo instituto. Luego supo que el profesor se había comprometido con alguien más y ya a ella no le latía tanto ese amor de antes, ya sólo sentía admiración y agradecimiento por él.

AL PROFESOR TAMBIÉN LE GUSTABA ELLA, PERO COMO ERA MENOR DE EDAD ELLA, NO INTENTÓ NADA. ADEMÁS, UN PROFESOR NO SE IBA A VER BIEN PRETENDIENDO A UNA ALUMNA Y SÓLO FUE UN AMOR CALLADO QUE LUEGO SE CONVIRTIÓ EN AMISTAD Y ADMIRACIÓN.

Encontrar el amor después de haber sufrido.

Estaba perdidamente enamorado de una linda chica. Esa chica era alta, piel morocha y unos preciosos ojos cafés. Tenía 22 años y yo 23.

Ella siempre supo todo lo que sentía por ella, pero ella a mí no me quería como la quería yo a ella. 

Me llamaba "mejor amigo" y ese "te quiero, pero como amigo" me dolía cada día más. Estaba en la friendzone. Cada día luchaba por ella, pero ya otro se había ganado su corazón y me tuve que olvidar y alejar de ella porque me hacía sufrir cuando la veía con él.

Pasó el tiempo y no supe más de ella, todavía no la había olvidado, quedaba en mí amor de ese que sentía por ella.

Duré 3 años en la misma situación y nunca me di la oportunidad de mirar a mi alrededor y ver que había alguien quien por tanto tiempo calló su amor por mí. No me había dado cuenta de esa chica que me miraba siempre y que yo nunca le puse atención.

Todo esos años sufrí por amar sin ser amado, mientras alguien sufría por mí. No me di la oportunidad de conocer a nadie todo ese tiempo.

La chica que sufría por mí se me declaró, nunca imaginé gustarle a ella porque si que era una gran mujer y la sentía mucho para mí. Me tomé mi tiempo y tomé una decisión, decisión de darme una oportunidad con ella y dejarme amar. Comencé a enamorarla más y a darle detalles y hacerla sentir protegida.  

Éramos novios y cada día era muy feliz junto a ella. Ya de aquel amor no quedaba nada, sólo un triste recuerdo. Lo importante es que ya era feliz con alguien más y que esa persona me quería igual. Mi novia es rubia, chaparra y ojos castaños, tiene 20 años. Vivíamos juntos y cuando ella terminara la Universidad, que sólo le faltaba 1 año, nos casaríamos y formaríamos una familia, tendríamos un hijo o una hija.

Mi primer besito.

El primer beso nunca se  olvida, pues fue el primero.

La conocí un día de abril, Éramos unos niños aún, cuando en el juego de la botellita me tocó darme un beso con la chica que me gusta.

Estaba súper nervioso. Nos besamos y fue tan mágico, quizás en mí suene muy cursi por ser hombre, pero es la verdad. No quería dejar de besalar, sus ricos labios sabor a miel eran tan dulces.
Pasaron mis segundos de emoción y continuamos en el juego.

Meses después aún seguía enamorado de ella, con apenas 15 años. 

Yo le confesé mi amor por ella, y ella no parecía ajena al sentimiento. Nos convertimos en muy buenos amigos y a través de nuestra amistad la fui conquistando. La llenaba de detalles, de cartas, de poemas, le hacía regalos y la llevaba a salir a muchos lugares, sí, con apenas 15 años. A mis 16 años aún sentía igual o más amor por ella. Era única en verdad, soñaba tras noches en ese beso con ella y en la persona tan encantadora como es ella. 

Llegó el día y ocurrió lo que tanto anhelaba. ¡Quiso intentarlo conmigo! La espera dio sus resultados. Ya éramos novios y nuestra relación sigue en pie y ya cada uno tiene 18 años. Es ella lo mejor que me ha pasado.

El primer amor nunca se olvida.

El primer beso nunca se olvida, el primer amor tampoco.

Tenía un novio a la edad de 14 años, fue mi primer novio en la adolescencia. No pensaba en tener novio a esa edad pero él  era tan distinto y especial que no me resistí a darle el SÍ.

Duramos ahí 7 meses y en la 3 semana de novios fue que nos besamos, ése fue mi primer beso.

Antes me daba asco eso y tal, pero cuando probé  sus labios toqué el cielo sin darme cuenta.

A casi cumplir 8 meses terminamos porque a él le gustaba otra chica, fue muy triste eso para mí.

Pasaron los años y ya era adulta, por ahí  me enteré que él tenía novia, desde que terminamos no había  tenido novio.

Un día nos cruzamos en la calle y él estaba muy conversador, me preguntó  qué  había  hecho todo ese tiempo y qué era ya de mi vida. En ese momento no podia conversar y me invitó un café para hablar cuando tuviera tiempo.

Fue bonito encontrarme con mi primer amor.

Le acepté  el café y revimos recuerdos viejos. Me dijo que no tenía novia hace 2 años.

Mis sentimientos guardados comenzaron a florecer y a él al parecer le pasaba igual. Hablamos por meses  y quisimos volver a intentarlo y ya somos novios de nuevo.

Nos íbamos a casar, pero sus padres lo impidieron.

Hola, me llamo Deyvis y tengo 20 años. Me considero un chico amable con un gran respeto y cariño hacia las mujeres. 

Tenía un padre que maltrataba a mi madre, al ver como ella sufría y sentir esa impotencia de no poder hacer nada por ser tan sólo un niño, me hizo prometerme a mí mismo no ser nunca como mi padre y respetar y valorar a las mujeres.

Tenía una novia y llevábamos 2 años de noviazgo, estábamos dispuestos a casarnos. Lamentablemente, ella era rica y yo de clase más baja.

Sus padres no estaban muy de acuerdo con nuestro noviazgo por ni clase social. Ella tenía 17 años.
Yo en serio la amaba, era tan linda, tan hermosa con unos sentimientos únicos y lo mejor es que me amaba a pesar de mi clase social.

Le pedí matrimonio y ella estaba encantada, cuando fui a pedirle la mano a sus padres ellos se negaron rotundamente. Les dije que esperaría a que ella cumpliera los 18 años que faltaban unos meses.

De igual forma, sus padres no quisieron y me prohibieron hasta verla. La veía a escondidas y se dieron cuenta y la trasladaron a otro instituto. Ella por ser menor de edad no se podía poner en contra de ellos y la mandaron por 2 años al extranjero... 

Me di la oportunidad de conocer a otra chica y tuve otra novia, pero ésta era de mi clase social y con ella pude ser feliz y sus padres me aceptaron. Estamos ahí intentando que todo resulte bien para ver si ya nos casamos.

A los 3 años de estar con ella, me enteré de que mi ex ya había regresado del extranjero, pero ya no sentía nada por ella, sólo los recuerdos quedaban. Ya tenía a mi esposa y con ella era bastante feliz.

Novio celoso, novio peligroso.

Hola, me llamo Yolanda y tengo 17 año. Tenía una bonita relación con mi novio, él tenía 19 años, hacíamos lo que todos los novios hacían, nuestro amor era bueno.

Durábamos hablando hasta la madrugada, luego de unos meses empezó a cambiar, sus celos obsesivos, al punto de, que me llegó a maltratar. Nuestra relación dio un giro mortal. Yo decidí cortar con él y cuando le dije que debíamos terminar se puso mucho más violento me gritaba que yo era suya y que no lo podía dejar, estaba asustada, me tenía amenaza. Mi amigo se dio cuenta de que él me estaba maltratando y se lo contó a mis padres. Mis padres decidieron ir a la policía porque yo era menor de edad y él era mayor. Yo le dije que si él tomaba tratamiento para su carácter le iba a decir a mis padres que retiraran la denuncia.

Pasaron meses y él en esos meses había estado yendo donde una psicóloga. Su carácter había mejorado y quería regresar conmigo, pero ya había rehecho mi vida con alguien más.

Amor inolvidable.

El primero de enero de 2013 conocí  un chico cuando estaba de vacaciones donde mi abuela.

Estaba yo sentada en una roca cuando él pasó y me hizo una pregunta, tímidamente le respondí con la cabeza,  o sea,  moviéndola.

Ese mismo día me encontré nuevamente con él y me dijo: qué casualidad, no? Ya 2 veces nos encontramos. Yo le dije; quizás. Comenzó a sacarme tema de conversación y me comenzó a caer bien. Los días que pasé allá fue él el único quién me habló y me sacó a ver el lugar.

Es raro pero ese chico se me hizo especial en ese poco tiempo, tanto que me gustó. Él  igual estaba de vacaciones y se iba un día después al día que yo me iba.

Cuando llegó el día en que me tenía que ir él se mostraba triste.

Un día antes él me había dicho que ya me había tomado mucho cariño y confianza. Él no tenía celular. Le dejé mi número por si algún día llegaba a tener.

Desde el día que me fui no he dejado de pensar en él. Ha sido muy triste y no pierdo la esperanza de volver a encontrarme con él.

Me enamoré de mi mejor amigo.

Hola, me llamo Francina y tengo 22 años. Soy una joven estudiosa. Voy a la Universidad y allí estudio medicina.

Vivo con mis padres aún, pero estoy pensando en independizarme muy pronto.

Tengo un mejor amigo que conozco desde mis 13 años. Yo era muy tímida, se me hacía difícil hablarle, pero como éramos vecinos comenzamos a llevarnos poco a poco.

A medida de los años la confianza el 1 al otro en ambos fue aumentando ya sabíamos los secretos más oscuros de cada uno.

A los 19 años me fui enamorando de él.  él estaba casado con otra mujer la cual esperaba un hijo de él.

Meses después su mujer murió en un accidente fue un golpe muy bajo para él. Pasaron 3 años y aún estaba enamorada de él y me decidí decirle mis sentimientos. Una mañana le dije que lo amaba y que llevaba 3 años enamorada de él. Él se quedó sin palabras y me dijo que nunca pensó qué alguien como yo se enamoraría de él.

Comencé a darme la oportunidad de conocer a otro chico y mi mejor amigo comenzó a celarme y me dijo luego de unas semanas que lo intentáramos, que desde el día que le dije mi amor por él, se quedó pensando en eso porque nadie lo conocía mejor que yo.

Amor de diferentes clases sociales.

Era yo un chico pobre, trabajador, que trabajaba día a día para conseguir la comida de diario y ayudar a mi familia. Era yo Juan José, un chico pobre que asistía a una Universidad de mucho prestigio, de personas ricas. En la Universidad me había ganado una beca completa y allí ejercía mi carrera como contador.

En mi salón había una chica encantadora, pero era rica. O sea, un sueño imposible para mí. Al parecer le caía bien porque siempre me sonreía.

Un día se le cayeron unas cosas y me bajé para ayudarla, desde ese día comencé a acercarme a ella.

Comenzamos a conocernos y ella era muy humilde en lo personal, a pesar de ser rica no lo aparentaba.

Quiso conocer a mi madre por una extraña razón que yo desconocía. Ella me invitó a su casa y yo no quería ir por mi clase social.

Me obligó ella a ir y fui, allí conocí a su padre; un señor simpático y humilde como ella, también conocí a su madre; una señora antipática y discriminadora con las clases sociales inferiores.

Pasaron unos meses y le confesé a Diana (así se llama la chica) que me gustaba, pero que entendía si me rechazaba, porque no igualaba a su clase social.

Luego de una semana ella aceptó ser mi novia, me sorprendí. Me dijo que ella sentía lo mismo por mí y que lucharía por nuestro amor, que ya ella era mayor y podía tomar sus propias decisiones.

Ahí vamos en la lucha...

Reflexión.

~Quiere a quien te quiere, y valora a quien te quiere y te valora. No dejemos que nuestros problemas arruinen la amistad o nuestra relación amorosa con alguien.

~Ama y valora a tus seres queridos, llegará un día donde ellos ya no estén. Sé un buen hijo. Sé el orgullo de tu familia y de esas personas que te quieren.

~Aprendamos a ser maduros cuando la situación lo requiere.

~Eméndemos esos errores que aún tienen solución, que el orgullo no gane la batalla. No dejes que tu orgullo te domine cuando se trata de pedir perdón o de perdonar.

Mi “mejor amiga“ y mi “novio“.

Hola. Me llamo Juana y tenía una mejor amiga llamada Juliana. Con Juliana llevaba 2 años de amistad, ya nos considerábamos mejores amigas. “Sabía“ todo de ella, y ella sabía todo de mí. También tenía un novio llamado Pedro, con él yo tenía 11 meses de noviazgo. Juliana y el él se llevaban muy bien.

Estaba pasando por unos momentos difíciles con Pedro, y le pedí darnos un tiempo. Los dos lo necesitábamos. Él aceptó.

Le conté a Juliana y le pareció perfecto eso. Juliana se seguía llevando con él e iba mayormente a su casa a visitarlo, supuestamente por ser amigos.

Cuando le pedí a Pedro, comenzar desde 0 él me dijo: “lo nuestro termina aquí“, no entendía por qué, nos habíamos dado un tiempo.

Pasé semanas de sufrimiento.

Un día, vi que Juliana me había dejado de hablar desde eso. Estaba sola. Luego me enteré que ellos andaban desde que le pedí tiempo a Pedro. “Me estuvieron viendo la cara“...

Ya sabrán cómo me sentí después de eso. Sentí esa gran decepción, fue la gran decepción de mi vida. Caí en depresión por largo tiempo.

Mi peor error.

Tenía un novio con el cual tenía 5 meses de noviazgo.

Él cuando no éramos nada y quería conquistarme me trataba de una manera hermosa, me respetaba, me cuidaba y me hacía muchos detalles para conquistarme.

Le costó trabajo y muchos meses para lograrlo, pero lo logró. Me fue enamorando con su personalidad y cuidado hacia mí.

Los primeros dos meses, la pasamos muy bien, todo seguía como cuando él me conquistaba. Después de los dos meses empezó a cambiar y a pedirme tener relaciones... yo le decía que no estaba preparada aún para eso. Que me diera tiempo porque igual llevábamos muy poco tiempo de noviazgo. Él aceptó por una semana. A la semana comenzó a insistir pero de otra manera.

Una noche me invitó a su casa a ver una película. Sus padres habían salido de viajes y él estaba solo. Fui con la condición de cuando acabará la película me llevara a mi casa.

Esa noche fui a su casa y mientras veíamos la película él empezó a acariciarme y besarme. Accedí porque era normal en el noviazgo. Luego cuando terminó la película me iba a ir a mi casa y él me dijo que estuviera un rato más con él porque estaba solo en casa. Me quedé por una hora. En esa hora subimos a su cuarto y conversar y allí me empezó a besar y besando y besando me agarró y me levantó a su cintura. Yo le dije “basta“ y ante sus caricias y besos me volví débil y me fue quitando la ropa lentamente. Ya ustedes sabrán lo que pasó.

Me fui a mi casa y todo estaba normal. Mi primera vez fue con él y a pesar de que no quería aún, en ese momento, fui débil.

Al siguiente día, le reclamé no haber esperado a que me sintiera preparada y discutimos. A los 3 días empecé a sentirme mareada y a vomitar. También le tomé asco a la comida. Una amiga vio mis síntomas y me dijo que me tenía que hacer la prueba de embarazo. Estaba asustada.

Me hice la prueba y lastimosamente salió positiva. No sabía cómo le diría eso a mis padres. Le conté a mi novio y él no se quiso hacer cargo de nuestra responsabilidad y me dejó.

Hablé con mis padres y decepcionados me preguntaron quién era el padre y les dije que mi novio, pero que él no se quería hacer cargo.

Mi ex desapareció, no lo volví a ver más y llevo 7 meses de embarazo. Será niña la bebé y le daré lo mejor de mí.

Querido/a amigo/a...

Querido/a amigo/a... comprendo que soy un tanto insoportable con un humor nada agradable. Comprendo que soy molesto/a y que te hago enojar fácilmente, también entiendo que no te gusta que delante de tus amigos haga el ridículo o que me soporte como un/a niño/a.

Querido/a amigo/o, sé que usted es una persona estricta y que le gusta hacer todo perfecto, también sé que soy todo lo contrario y que a usted le molesta.

Querido/a amigo/a, hoy vengo a decirle/escribirle que usted es la persona que más admiro, quiero y aprecio en esta tierra. Que es la persona que a pesar de que no me soporta, yo sé que me quiere. Es usted la persona que sabe mis más íntimos secretos y mi manera de ser.

Es usted querido/a amigo/a a la que le he confiado todo lo mío, es poco pero es lo que me hace feliz. Es usted querido/a amigo/a a la que defiendo con espadas y armas. Es usted lo más que adoro, aunque a usted le parezca molesta mi actitud. Usted no encontrará a alguien que sepa guardarle sus secretos y quererlo/a como yo.

Sentimientos encontrados~

Muchos pasamos por sentimientos encontrados, ese momento donde tienes tus sentimientos revueltos y quieres a dos personas y no sabes a cuál darle el sí. Pero esas personas luchan por ti día a día esperando jna respuesta tuya.

Es un caso por el cual la mayoría pasamos y no sabemos a cuál elegir. Recuerda que esas personas se pueden cansar de esperar a que te decidas porque dirán “no está segura de lo que quiere“.

Debes analizar la personalidad de cada uno y la forma en como te hacen sentir y te tratan. Allí cuando analices esas cosas podrás saber con quién quedarte.

Elegir a 1 no significa dejar a un lado a la otra persona, claro, si esa persona no te quiere como amiga ya es una decisión de esa persona.

El perdón no arregla un corazón roto.

Tenía un novio detallista y amoroso. Teníamos 10 meses de noviazgo y pensábamos en un año en matrimonio.

Sus padres me conocían y los míos lo conocían. Éramos la pareja “perfecta“ para los ojos de nuestros amigos.

Estaba muy feliz con él, lo quería bastante, tanto que no veía mi vida sin él. Él tenía 20 y yo 19.

Íbamos a la misma Universidad, allí justo fue que nos conocimos y nos enamoramos. Él tenía muchas amigas, pero no sentía celos de ellas. Yo igual tenía amigos, y él tampoco sentía celos. Nos teníamos bastante confianza ambos.

Una noche me pidió matrimonio y por supuesto, yo acepté. Le dimos la noticia a nuestros familiares y amigos y ellos se mostraron muy feliz y encantados por nosotros.

La boda iba a ser en 6 meses, ya pensaba en los preparativos y todo.

Una semana antes de la boda él tuvo una llamada inesperada y salió. Había dejado el celular y lo seguí para alcanzarlo y dárselo.

Eran las 8:39PM y lo vi entrar a un Hotel. Miré su celular y la llamada tenía de nombre Alejandra, no sabía de ninguna amiga llamada así.

Esperé afuera hasta que saliera, y salió agarrado de manos de una chica, que ha de ser la supuesta Alejandra. Me acerqué a ellos y se puso nervioso. Lo felicité por estarme engañando y me fui.

Me estuvo llamando y buscando en mi casa todos los días, me mandaba mensajes de perdón y cambié de número.

Duré meses en esa depresión. Ya faltaba poco para la boda y tuve que cancelar todo, a parte de la humillación tuve que aguantar todo mi dolor...

Amor de adolescentes.

Éramos dos adolescente de 15 años.

Nos fuimos “enamorando“ uno al otro, siempre soñamos pasar juntos una vida entera. Era ella muy hermosa exterior e interior. Era yo un joven común y corriente de 15 años, me gustaba el fútbol y ese era mi pasatiempo.

A ella le gustaba el fútbol y salíamos al patio a jugar ambos, siempre le ganaba y cuando veía que ya no le agradaba la dejaba ganar y la felicitaba con un beso.

Jugábamos play en su casa y era rara la vez que no elegíamos fútbol para jugar. Veíamos películas juntos y hacíamos pop corn juntos.

Sus padres y mis padres se llevaban muy bien, por ello, aceptaron nuestro noviazgo.

Soñábamos en un futuro juntos y en una familia feliz junto a 2 hijos.

Ya llevábamos meses así y cuando nos peleábamos por diversas cosas siempre nos arreglábamos porque en eso consiste una relación. No todo es color de rosa, hay que saber afrontar y arreglar los problemas y/o errores y esos errores aceptarlos sabiendo que nos equivocamos.

Ya llevamos un año de noviazgo y espero que sígamos así por muchos años más,  a nuestra edad andamos en “edad del gusto“ pero, nosotros somos todo lo contrario a ello.

Enamorado de una alumna.

Me enamoré de una alumna.

Soy un profesor de secundaria y tengo 30 años. Trabajo en un colegio de prestigio. En mi salón había alrededor de 25 estudiantes, la mayoría mujeres.

Había una chica que siempre destacaba por su buen comportamiento, dedicación e inteligencia. Extrañamente todo eso me fue enamorando de ella. Un día al tocar receso ella se me acercó a hacerme unas preguntas sobre un tema que no entendía, pero ya debía irme y la invité a un café que quedaba cerca del colegia. Ella estaba indecisa porque un profesor y una alumna en una cafetería daría mucho de que hablar.

Le dije que entonces al día siguiente a la misma hora viniera y con gusto le ayudaría.

Llegó el día y le expliqué los temas y entendió rápidamente, fue agradecida conmigo y se retiró. Uff, esa chica me encantaba. Pero sabía que lo nuestro era imposible.

Para no cometer algo por el cual arrepentirme acepté un trabajo en una Universidad prestigiosa y hasta entonces me sigue encantando esa chica.

Jugó conmigo.

Hola, me llamo José y tengo 21 años. Mi historia comenzó así...

Conocí en la Universidad a una chica muy hermosa, atenta, buena persona o eso parecía.

Me comencé a acercar a ella por motivo de trabajos universitarios, ella correspondió a mi amistad y nos llevábamos muy bien.

Ella vivía sola y me invitó a su casa a hacer un trabajo, el tiempo que duramos allí fue el tiempo suficiente para conocernos más. Comencé a sentir atracción por ella y mientras más la trataba más me gustaba.

Pasaron 3 semanas y le confesé que me gustaba y ella me dijo que le diera tiempo. Luego de unos días me dijo que igual le gustaba, nos convertimos en novio y no sé por qué razón no quería hacerlo oficial aún.

Llevábamos 2 meses de novios y le dije que ya teníamos que hacerlo oficial y ella me dijo que no y se enojó porque decía que yo la sofocaba demasiado con eso.

Pasó otro mes más y me enteré de que ella tenía un novio que sus padres conocían, eso me dolió bastante, ya entendía todo. Todo ese tiempo estuvo jugando conmigo. Cuando le dije que ya sabía que tenía novio ella me dijo que no lo quería y le dije que solo mentía y que si es así que lo demuestre dejándolo y no quiso hacerlo. Se fue y se alejó de mí y yo de ella, por mucho tiempo sufrí su amor.

Diario de un/a adolescente~

Hay momentos en los que sientes que todo se te viene encima.

Hay decepciones que te hacen sufrir, pero te hacen aprender y a hacerte más fuertes.

Hay personas que juegan contigo sin saber cuán daño te pueden llegar a hacer.

Personas que te dicen “te quiero“ pero que luego te das cuenta que no lo sentía.

Ese momento donde te sientes solo/a, donde a nadie tienes y nadie te quiere.

Ese momento de rabia hacia las personas que te rodean porque ya perdiste la confianza.

Ese momento donde te refugias bajo tus sábanas para llorar tranquilo/a.

Ese momento donde sólo escuchas canciones tristes para sentirte más mierd*.

Tambien llega ese momento donde ya todo y todos te dan igual y te alejas hasta de aquella persona que te quiere, pero que te han lastimado y mentido tanto, que crees que esa persona es igual.

El amor te cambia.

Esta es mi historia... A los 18 años mientras desayunábamos mis padres y yo entra un asaltante a la casa, dispuesto a matarnos, mi padre se enfrentó con él y el asaltante le dispara y se va...

Lamentablemente mi padre no pudo salvarse y desde el día en que murió se me fueron todas las ganas de hacer algo por mi vida y empecé a caer en el alcohol y fiestas.

Mi madre estaba muy preocupada por mí. Mi cuarto reflejaba mi poco interés por ser alguien. Día a día mi padre pedía por mí con la esperanza de que cambiara mi modo de ver la vida.

Pasaron 3 años y un día fuera de la secundaria vi a una chica que me llamó mucho la atención. Me gustó. Comencé a acercarme a ella y ella me correspondía. Era una chica increíble.

La fui enamorando poco a poco. Le llevaba flores y chocolates a la secundaria, la acompañaba a su casa al salir, la invitaba a distintos lugares. Estaba dispuesto a cambiar por ella.

Con el tiempo nos convertimos en novios y ella me ayudó a entender y cambiar mi vida. Le dio sentido a mi vida y ya había tomado un buen camino.

El amor te cambia.

Padres que interfieren en el amor.

Hola, tengo 17 años y mi novio 22. Llevábamos 4 años de novios y manteníamos una relación muy hermosa, éramos muy felices, pasábamos los mejores momentos juntos. Nos amábamos infinitamente. Había un problema, mis padres...

Estábamos dispuestos a casarnos, ya teníamos todo planeado, pero mis padres se opusieron a nuestro matrimonio, no lo aceptaron por ser menor de edad. No les perdoné eso a mis padres, él era el amor de mi vida. Mis padres no aceptaban ni el noviazgo ni el matrimonio.

Mi novio decidió que nos separáramos hasta ser mayor de edad, no quería que mis padres me llevaran lejos por él, pero yo no quería estar con mis padres, quería irme con él, escaparme. Era imposible. Era él muy maduro y tenía todo allí, su trabajo, todo.

Fue horrible el año que duré separada de él, esperaba entusiasmada ese día donde ya iba a poder tomar mis propias decisiones, eso siempre me dijeron mis padres.

Pasaban meses y meses y ya se acercaba el día, él me seguía esperando y yo lo seguía amando. Llegó el día y volvió a pedirme matrimonio, ya mis padres no podían oponerse y por supuesto, me casé con él y somos felizmente casados.

Mi “amigo“ traicionero.

Éramos dos adolescentes de 16 años, yo su mejor amigo, él mi mejor amigo. Parecíamos hermanos, las personas siempre nos confundían, pero no lo éramos igual lo quería mucho y teníamos desde los 13 años esa amistad.

Fue muy raro como nos hicimos amigos, cuando éramos niños nos caíamos mal porque nos gustaba la misma chica y esa chica era mi novia actual.

Los dos teníamos novia con las cuales cada uno era feliz, él tenía 3 meses con su novia y yo iba a cumplir 1 año con la mía. Los 4 nos reuníamos para ver películas, ir de playa, jugar play, entre otras cosas.

Mi novia se llevaba muy bien con su novia, eran buenas amigas. Pero pasaba algo... Yo sentía que la novia de mi amigo me tiraba la onda, me miraba de una manera no muy particular y a veces se me acercaba en modo de coqueteo. No le puse mucha atención a eso. Mi novia me había dicho lo mismo, pero de parte de mi amiho.

Un mes después escuché hablar por teléfono a mi amigo lo cual nada más alcancé a escuchar una palabra y fue “plan“.

Cuando entré al lugar donde él estaba, colgó el teléfono y me dijo “raro verte a esta hora por aquí“ -miraba nervioso- y le dije: “sólo vine  a pedirte prestado tu libro“.

Ese día en la noche nos reunimos en mi casa y tomamos un poco de alcohol. Mi amigo andaba un poco ebrio y él y su novia se fueron a la casa de cada uno. Él dejó su celular y me dio curiosidad chequearlo y vi varios mensajes donde él y su novia hablaban de un plan, y ese plan era mi novia y yo... Decían que entre los dos se encargarían de separarnos para tener oportunidad ellos de ligarme a mí y a mi novia. Nunca esperé eso de él, creo que aún me guardaba rencor por lo de nuestra niñez.

Obviamente nos sentimos decepcionado y yo corté todas las relaciones de amistad con él y con ella, mi novia hizo lo mismo. Y vivimos nuestro noviazgo feliz aún.

El vecino campesino y la dama capitalizada.

Hola, esta es la historia de un campesino rico y una chica rica pero no campesina.

El campesino y su familia se mudaron a la gran ciudad, se llevaron a sus animales, era una casa grande.

Llevaron a sus animales con ellos y a sus a nuevos vecinos no les encantó la idea, pero habían unos chicas que sí les agradó.

Una de ellas fue a darles la bienvenida y conoció a uno de los campesinos los cuales tuvieron  química a primera vista. Ella le pidió un paseo a caballo y él le cumplió, a la madre de la chica no le gustó para nada que hasta se desmayó.

Ellos se siguieron viendo a escondidas porque ella no aprobaba esa amistad.
Se iban a dar paseos y se fueron conociendo y gustando más. Él con el tiempo le pidió noviazgo y a pesar de la contraria de la madre de ella, ella le dijo que sí, eran novios a escondidas de la familia de ella.

La madre un día siguió a su hija y vio que ellos estaban juntos y vio cuando se besaron y fue y la agarró y la llevó a la fuerza a su casa. Le prohibió verlo y le puso castigo de no salir de casa por 1 mes.

Él en las noches iba y se subía por una escalera para ver a su novia, pero los padres de ella reforzaron la seguridad con perros.

Pasó el mes y ya no estaba castigada, pero seguía prohibido verse. Ella se enfrentó a su familia, ya tenía 19 años y les dijo que no iba a dejar de luchar por él y que no lo dejaría aunque ellos no lo aceptaran. Su familia le dijo que era eso o se iba de la casa y ella se fue...

La familia del campesino tenía dinero igual, y la acogieron en su casa y los chicos vivieron feliz su noviazgo y en dos años se casaron a pesar de que la familia de ella le siguió molestando la relación aun ella fuera de su casa.

La “amiga“ mentirosa.

Hola, tengo 17 años y mi historia es... Llevaba 4 años de amistad con una amiga y ella sabía todo de mí, la quería demasiado, era como una hermana para mí.

Compartíamos cada uno de nuestros momentos tristes, felices, etc. Ella tenía novio con el cual me llevaba muy bien, él la quería bastante y admiraba su amor hacia ella. Su novio tenía un mejor amigo el cual me gustaba y ella lo sabía, ella me había dicho que él tenía novia y le creí, así que no intenté nada.

Una noche de películas entre los 4 me acerqué a él y le pregunté por qué no había traído a su novia y me dijo: “¿novia? no tengo novia, ¿de dónde sacaste eso“ «se reía mientras me lo decía». Le dije: “Ahh. Nadie me lo dijo, sólo lo supuse" - entre carcajadas.

Pasamos a la sala y terminamos de ver la película. Al siguiente día le dije a mi amiga que ella me había mentido, y me dijo que ella pensaba que si tenía. Cambiamos de tema y comenzamos hablar de ella.

Una tarde en mi casa, tocan la puerta y cuando me acerco a abrirla era él, se me hacía extraño verlo ahí. Abrí y lo saludé con un beso en el cachete. Le dije: “pasa y toma asiento" agregué “¡qué extraño verte aquí“ y me dijo: ”Vine a invitarte a una pizza“. Quedé asombrada... y también agregó “sólo quiero conocerte mejor“. Le dije que me esperara unos minutos a lo que me cambiaba.

Subí a mi habitación y le dejé un mensaje a mi amiga de que saldría con él, me puse una ropa rápido y bajé.

Cuando llegamos al lugar comenzamos a conversar y entre conversas y conversas vi que teníamos muchas cosas en común y había química. Después de unas horas me llevó a mi casa y me dijo que fue un placer conocerme mejor.

Subí a mi cuarto, vi un mensaje de mi amiga y le respondí que había llegado. Toda la noche estuve pensando en él.

Al siguiente día, me envió un mensaje de buenos días y fue el mensaje que alegró mi día.

Mi amiga ese día fue a mi casa para conversar sobre lo ocurrido y noté en su rostro un gesto no muy agradable. No le di importancia y seguimos hablando, pero ya esta vez de ella y su novio.

Unos días después andaba extraña porque el chico no me había escrito jamás y el siempre me dejaba un mensaje de buenos días. Pasaron y pasaron los días y él no daba señales. Le conté a mi amiga y no me escuchó mucho que digamos.

Le escribí yo a él preguntándole qué pasaba y me dijo que yo era la que no quería hablar con él porque tenía novio. -yo una forever alone con novio???- le dije: “¿de dónde sacas eso?“ y me dijo: “tu amiga me lo dijo, pero no importa quien me lo dijo, no te molestaré más“. Me colgó... Sin duda fui a la casa de ella y le reclamé frente a su novio, le dije que por qué andaba empeñada porque no andáramos él y yo y me dijo que porque él no era un buen chico. Obviamente no me creí y le dije a su novio que ella le gustaba su amigo y él mismo afirmó que era cierto, porque había visto unos mensajes de ella en el celular de él.

Le dejé de hablar y su novio también la dejó, quedó sola... Y el chico y yo seguimos tratándonos y nos hicimos novios.

Nos queremos, pero tengo miedo.

Hace un tiempo conocí a un chico muy atractivo, el cual me encantó desde la primera vez que lo vi pero había un problema, tenía novia.

Desde que comenzamos a tratarnos nos llevamos muy bien y nos tomamos poco a poco confianza. Él siempre fue muy lindo conmigo, con el tiempo eso fue cambiando bastante, ya no sólo era lindo también me decía que le gustaba.

Yo le decía que sólo lo quería como un amigo, pero en realidad me gustaba, pero no se me olvidaba de que tenía novia.

Meses después él terminó con ella y me decía que me enamoraría poco a poco porque yo le gustaba y le encantaba estar conmigo. Yo sentía miedo por algunas cosas y por eso siempre le dije que a ver si podía porque él no me gustaba. Me encantaba cuando nos poníamos a jugar, sentía cosquillas en el estómago, pero era imposible lo nuestro.

Él me decía que haría de todo por mí pero yo le dije que ya se le pasaría ese amor. Tenía miedo porque igual pensaba que sólo quería jugar conmigo y para evitarme un sufrimiento mayor inventé todo un drama por el cual ahora ya no hablamos y estoy arrepentida de haberlo hecho él regresó hasta con su novia y pues yo poco a poco lo he ido olvidando.

El profesor y la alumna.


Había una vez un profesor de Literatura, estaba casado y a la espera de una hija, éstos vivían felices. 

Un día el profesor llevó un curriculum de trabajo a un nuevo instituto y fue asignado como maestro de Literatura. Era joven, guapo y un encantador intelectual. Al entrar el profesor a su curso asignado, las alumnas quedaron asombradas ante tal hombre que había entrado. 

El curso estaba desordenado, el profesor entró algo enojado y gritó que se calmaran, todos tomaron sus puestos y una alumna le ayudó a poner orden.

Esta alumna estaba dispuesta a todo por el profesor, pero había otra que se hacía la mosquita muerta porque decía que ningún hombre podía decirle que no. Armó todo un drama y con el tiempo se fue acercando al profesor, éste profesor estaba algo admirado por ella, porque era la más inteligente e inocente. Había otra alumna que se le lanzaba. Una vez el profesor estaba en el baño y sonó su celular y a tomarlo era su esposa, ahí en ese momento entró la alumna que se le lanzaba y comenzó a desnudarlo, pero él le puso un alto al terminar de hablar con su esposa. 

Pasaban los días y esa alumna le coqueteaba, él no tenía ningún interés por ella. La otra mosquita muerta se grabó desnuda y consiguió el número del profesor y le mandó un mensaje diciéndole que necesitaba ayuda. Él rápidamente le contestó y la citó en un lugar, le preguntó cómo obtuvo su número y le dijo que una profesora se lo había dado. Le dijo que su novio la estaba amenazando con un vídeo donde ella aparecía desnuda y que no sabía que hacer. Ella le mandó el vídeo y él le dijo que por qué se dirigió a él si sólo era un simple profesor. Ella le dijo que a parte de necesitar a un profesor, necesitaba a un hombre que la entendiera. Se marchó y al siguiente día, el profesor vio como su novio la intentaba golpear y el profesor agarró al chico y le dijo que si seguía amenazándola iba a denunciarlo. El chico decía que no sabía de qué amenaza le hablaba.


Día a día la alumna mosquita muerta le mandaba el vídeo al profesor y un día el profesor salió con su esposa a tomar un café y las dos alumnas fueron y se acercaron a ellos y la esposa las invitó a tomar un café con ellos, a  la profesora les cayó bien las chicas. Ahí la alumna lanzada amiga de la alumna mosquita muerta les dijo que su amiga se iba a ir y que iba a hacer una fiesta el viernes por si querían ir a la despedida.

La esposa del profesor dijo que asistirían, pero el profesor no quería ir. Al final, la esposa se puso mal y no pudo ir, pero le insistió a su esposo que fuera a la despedida y también la alumna le había enviado un mensaje de que fuera a su último día. El profesor fue y allí la alumna mosquita muerta le coqueteaba y al llegar las 11pm él se quería ir y ella lo besó y tenía una pastilla en la boca y se la dio. Después de haberse tomado la pastilla se puso como loco y hasta la llevó al cuarto y allí él le dijo que estaba mal lo que hacía y quedó desmayado. Ella enojada dijo: NO LO LOGRARÁS, NO, NO, NO. y se quitó la ropa y se hizo pasar como víctima de violación y el profesor fue detenido pero luego la amiga de ella declaró la verdad a las autoridades y él fue liberado.
LUIS, CAPÍTULO 2

Pasado 10 años, los últimos días de un lujoso agosto me recibieron al regresar al nativo valle. Mi corazón rebosaba de amor patrio. Era ya la última jornada de mi viaje, y yo gozaba de la más perfumada mañana del verano. El cielo tenía un tinte azul pálido: hacia el Oriente y sobre las crestas altísimas de las montañas, medio enlutadas aún, vagaban algunas nubecillas de oro, como las gasas del turbante de una bailarina, esparcidas por un aliento amoroso. Hacia el Norte flotaban las nieblas que durante la noche habían embozado los montes lejanos. Cruzaba planicies alfombradas de verdes gramales, regadas por riachuelos cuyo paso me obstruían hermosas vacadas, que abandonaban sus sesteadores para internarse en las lagunas o en sendas abovedadas por florecidos pisamos e higuerones frondorosos. Mis ojos se habían fijado con avidez en aquellos sitios medio ocultos al viajero por las copas de añosos guadales en aquellos cortijos donde habían dejado gentes virtuosas y amigables. En tales momentos no habrían conmovido mi corazón las más sentidas arias del piano de U***. Si los perfumes que aspiraba eran tan gratos, comparados con el del traje lujoso de él, si el canto de aquellas aves sin nombre tenía armonías tan dulces a mi corazón!

Estaba muda ante tanta belleza, cuyo recuerdo había creído conservar en mi memoria porque algunas de mis estrofas, admiradas por mis condiscípulos, tenían de él pálidas tintas. Cuando en un salón de baile, inundo de luz, lleno de melodías voluptuosas, de aromas mil mezclados susurros de tantos ropajes de hombres seductores, encontramos aquel quien hemos soñado a los diez y ocho años y una mirada fugitiva suya quema nuestra frente,  su voz hace enmudecer por un instante toda otra vez para nosotras, y sus flores dejan tras sí esencias desconocidas, entonces caemos en una postración celestial, nuestra voz es impotente, nuestros oídos no escuchan ya la suya, nuestras miradas no pueden seguirlo. Pero cuando, refrescada la mente, vuelve él a mi memoria horas después, nuestros labios murmuran en cantares su alabanza, y es ese hombre, es su acento, es su mirada, es el ruidos de los pasos sobres las alfombras, lo que remeda aquel canto que el vulgo creerá ideal. Así el cielo, los horizontes, las pampas y las cumbres del Cauca hacen enmudecer a quien los contempla. Las grandes bellezas de la creación no pueden a un tiempo ser vistas y cantadas; es necesario que vuelvan al alma, empalidecidas por la memoria infiel.'

Antes de ponerse el sol, ya había yo visto blanquear sobre la falda de la montaña la casa de mis padres. Al acercarme a él contaba con mirada ansiosa los grupos de sus sauces y naranjos, al través de los cuales vi cruzar poco después las luces que se repartían en las habitaciones.

Luis.

LUIS, CAPÍTULO 1

Era yo una niña aún cuando me alejaron de la casa paterna para que diera principio a mis estudios en el instituto de ***, situado en San Francisco hacía pocos años y famoso en toda la República por aquel tiempo.

En la noche víspera de mi viaje después de la velada, entró en mi cuarto una de mis hermanas y, sin decirme una sola palabra cariñosa, porque los sollozos la embargaban la voz, cortó de mi cabeza unos cabellos: cuando salió habían rodado por mi cuello algunas lágrimas suyas.

Me dormí llorando y experimenté como una vaga presentimiento de muchos pesares que debía sufrir después. Esos cabellos quitados de una cabeza infantil, esa precaución del amor contra la muerte delante de tanta vida hicieron que durante mi sueño vagase mi alma por todos aquellos sitios donde yo había pasado, sin comprenderlo, las horas má felices de mi existencia.

A la mañana siguiente, mi padre desató de mi cabeza, humedecida por tantas lágrimas, los bazos de mi madre. Mis hermanas, al decirme sus adioses, las enjugaron con besos. Luis esperó humildemente su turno y balbuciendo su despedida, juntó su mejilla sonrosada a la mía helada por la primera sensación de dolor.

Pocos momentos después seguía yo a mi padre, que ocultaba el rostro a mis miradas. Las pisadas de nuestros caballos en el sendero guijarroso ahogaban mis últimos sollozos. El rumor del Zabaletas cuyas vegas quedaban a nuestra derecha, se aminoraban por instantes. Dábamos ya la vuelta a una de las colinas del vereda, en las que solían divisarse desde la casa viajeros deseados; volví la vista hacia ella buscando uno de tantos seres queridos; Luis estaba bajo las enredaderas que adornaban las ventanas del aposento de mi madre.

CONTINUARÁ...

Un amor platónico.

Todo empezó una mañana, día jueves, justamente faltaban 15 minutos para que diera las 10am. Sther y unas amigas estaban reunidas fuera del salón de baile emocionadas por entrar a su primer clase de ensayo para crear una coreografía perfecta, ya que ese era el examen final del baila en el instituto.

Mis amigas conocían al coreógrafo Manuel al cual le pidieron ayuda para montar una coreografía buena, al llegar el coreógrafo al salón, Sther y mis amigas miraron a Manuel. Al mirar a los ojos a Sther, me di cuenta de que el profesor le parecía atractivo, se quedaba mirándolo disimuladamente para que no se dieran cuenta de que sentía tracción por él.

Manuel estaba casado, la chica que había llevado para que le ayudara era su esposa, a Sther no le dio mucha importancia eso porque al principio creyó que simplemente era atracción y no algo tan fuerte como el amor. También Sther tenía novio.\

Sther asistía a todas las clases de ensayo y cada vez que veía al coreógafo sentía mucha más atracción por él, y que de alguna u otra manera, ese hombre la consideraba atractiva porque ella bailaba excelente y tenía un buen cuerpo.

Él tenía 28 años y la miraba más a ella que a las otras chicas, y todas eran atractivas, pero él miraba mucho más a Sther, o quizás... esas miradas eran el resultado de la ilusión de Sther hacia el hombre.

Ya había llegado el último día de la coreografía y les había quedado espectacular, sólo faltaba que se coordinaran bien para que quedara completo todo y saliera excelente. Al etar ensayando todos los temas, una chica morocha entró al salón de ensayos, la cual era la esposa del coreógrafo, se reflejaba todo por los espejos del salón y ella lo abrazó. Lo estaba abrazando y la pareja miraba a todas las chicas bailar, y Sther los vio y de pronto se le fueron las ganas de seguir bailando, ya no le estaba poniendo empeño. Al parecer, le dolió bastante verlos, nunca olvidará eso. Cuando terminaron el remix, la esposa se dirigió a la laptop para volver a reiniciar las canciones.

El coreógrafo volvió a marcar todos los pasos nuevamente. Ya Sther no miraba igual, pero ella fingía estar normal, siguió relajando con sus amigas para que no se dieran cuenta de su tristeza. Ella seguía recordando ese abrazo y estaba bastante desilusionada que hasta lloró.. Al final del ensayo ella fue la única que no se despidió ni dio las gracias al coreógrafo. Ella se fue a su casa y allí le contó todo a su mejor amiga, y ésta la apoyó y trató de subirle los ánimos, también le dio varios consejos. Sther actualmente, sigue recordando a ese hombre y sigue triste.


-> Muchas chicas tenemos un amor platónico, el cual creemos que será nuestro para toda la vida en el mundo de nuestros sueños, y que a pesar de que esté casado no dejamos de cometer el pecado de desear el hombre del prójimo, esas inmensas ganas de verlo, besarlo, y el gran interés hacen que se cometa un pecado. Para que duela menos es mejor tener un platónico a un famoso y no a una persona cercana, de esa manera dolerá menos.

Éramos amigos, pero parecíamos novios.

Éramos amigos, pero parecíamos novios.


Todo comenzó en el 2012, conocí a un chico encantador en Internet, comenzamos a tratarnos y hablábamos todos los días. Con el tiempo nos fuimos tomando mucha confianza, él siempre me trataba bonito, era algo que admiraba de él y que agradecía bastante.

Parecíamos unos niños jugueteando, nos poníamos muchos sobrenombres y nos decíamos lo tanto que nos queríamos. Él tenía novia, sólo éramos él y yo algo así de mejores amigos, me encantaba hablar con él y mucho más me encantaba como me decía. Era todo muy hermosa nuestra relación de amistad.

Pasó el tiempo y él seguía con su novia, pero decía que yo le gustaba, yo siempre le decía que no confundiera las cosas que sólo lo quería como amigo, y así era, lo quería bastante pero como amigo. Yo respetaba que él tuviera novia también, por eso siempre se lo recordaba. Él se ponía triste porque yo no le correspondía, pero siempre siguió tratándome con el mismo amor, algo que admiraba de él era eso.

En el 2013 terminó con su novia llamada Belkis, yo le pregunté por qué había terminado y me dijo que porque no podía estar con alguien que no quería. Le dije que sólo esperaba que todo se arreglara y que regresaran pronto.

Cuando terminó con su novia tuve más la confianza de decirle que lo quería, pues yo cuando andaban respetaba eso, aunque solamente éramos amigos.

Se llama Israel, hasta su nombre me parecía hermoso, pero yo no sé por qué siempre lo vi como el hermano que nunca tuve a pesar de la distancia. A mí me gustaba un chico en real pero pocas veces trataba ese tema con él por la misma razón de que quizás se ponía mal o celoso.

En el 2014 regresó con su novia y yo ya tenía novio, justo el chico que me gustaba en el 2013 pude tenerlo. Él al parecer aún sentía amor por mí y cuando le confesé que tenía novio creyendo yo que ya a él no le gustaba, él actuó celoso y día trás días se fue alejando de mí. Yo le decía que no lo entendía, porque ya había regresado con su novia y yo no le decía nada, y él sólo me contestó ''no es lo mismo, porque yo a ti nunca te gusté''. Se distanció de mí y ya ni hablábamos, me dolía un poco haberlo perdido porque lo quería bastante, pero ya no quedaba de otra...

El amor duele.

El amor duele.

Todo empezó en el 2014, conocí a una chica bien guapa. Al principio, debo admitir que me gustó por su físico, atracción física, eso fue. Asistíamos al mismo salón y siempre quedaba como tonto mirándola.

La maestra de Historia puso un trabajo en grupo de dos personas, y por casualidad nos tocó a ella y a mí. Un día hacíamos el trabajo en su casa y otro en la mía, siempre aprovechaba para hablarle y desde que comencé a tratarla me di cuenta de que era una hermosa persona con hermosos sentimientos y la fui queriendo más, ya no sólo era su físico el que me atraía.

Ya faltaba 1 día para entregar el trabajo, llevábamos 6 día en él y fueron suficientes para volvernos muy amigos, tan amigos como para que me confesara que le gustaba un chico que iba al mismo salón. Yo me sentí algo mal, pero me propuse la meta de ganarme su corazón, ya tenía su confianza el cual era un gran paso en mi meta.

Día a día hablábamos, en el colegio merendábamos juntos y a veces se iba con el chico que le gustaba. Su felicidad era mi tristeza, porque ella era feliz con él.

Luego de 1 mes ellos se convirtieron en novios, por un lado me ponía feliz porque la veía feliz con él, pero por otro me sentía muy triste, pues la amaba. Ella me veía como su mejor amigo nada más, y desde que se puso de novia con ese chico se alejó un poco, ya pasaba todo su tiempo con su novio pues la entendía en esa parte.

Pasaron meses y meses y ellos cada día eran más unidos, y yo pasé todo ese tiempo triste. El amor duele.

Se acabó el año escolar y cambié de colegio, ya tenía 3 meses sin saber de ella, ya volvimos a ser unos completos desconocidos.

En el nuevo colegio a mitad de año escolar se me acercó una chica y me dijo que le gustaba, me di la oportunidad de conocerla y con ella pude olvidarme de la otra chica. Luego de 2 meses nos hicimos novios y somos muy felices, llevamos ya 1 año y 4 meses.

Conocidos en el colegio, y esposos de mayores.

Las redes sociales se están influenciando mucho en la vida de todos. 

Mi historia es... Mis amigos y yo nos reencontramos en las redes sociales y todos quedamos en hacer una cena para hablar de nuestras vida, ahí estaba Lisbeth, que siempre pasó bastante desapercibida para mí, pero cuando regresé a mi casa dije "Vaya con Lisbeth...".

Pasó el tiempo y seguimos hablando por Internet, y por parte de ambos había ''tonteo'' y una noche quedamos en hacer una cena a escondidas para vernos ella y yo... Esa noche hablamos, cenamos, tomamos unas copas, nos besamos y fuimos a mi casa y allí nos acostamos. Al despertar al día siguiente, nos miramos y nos echamos a reír, parecía jugueteo de niños, recordábamos todo lo que pasamos en el colegio y veíamos fotos donde salíamos ambos y nos decíamos ''quién lo diría...''.


Comenzamos a salir y todo era muy agradable al lado de ella, salíamos a cada momento a diferentes lugares; cine, playa, restaurant, etc... Vimos que estaba funcionando nuestra relación y convocamos una cena para contarle a nuestros amigos, fueron muchas carcajadas pero a ellos les gustó bastante que estuviéramos saliendo. 

Llevamos 4 años saliendo y somos muy felices, estamos pensando en el matrimonio, ya vivimos juntos.

Una historia loca y rara de amor.

El vecino encantador.

Hola, me llamo Perla y tengo 16 años.

Mi historia es así...

Tengo un vecino muy guapo y buena persona. Mis hermanas tenían muy buena relación con él, pero yo no salía de mi casa y ni sabía que existía hasta que comencé a salir. Veía que ellas y él se saludaban muy bien. A mí él me comenzó a gustar poquito a poquito, quería hablarle pero me daba pena, veía como él y mis hermanas se llevaban también, ya ellos tenían casi un año viviendo ahí y apenas sabía de su existencia.

Pasaban y pasaban los meses y seguía igual sin hablarle, me estaba volviendo loca porque en serio él me gustaba. A veces pasábamos sonrisas y así, pero nunca pasamos una palabra.

Él tenía novia y yo era una total desconocida para él, por tanto, fui dejando la ilusión que sentía con él.

Meses después él me dijo ''Hola'', y yo le dije ''Hola y adiós, ya debo salir''. De hecho, no tenía que salir, pero no quería hablarle porque sé que me ilusionaría de nuevo. Luego de unas semanas me enteré que terminó con su novia. Y un día estaba fuera de casa y él me vio y me miró, yo me quedé mirándolo fijamente hasta que él volteó. 

Al pasar los días, hablábamos entre sonrisas, esa sonrisa de él me mataba.

Pasó el tiempo y él volvió con su novia, y yo volví a caer de esa nubecita. Él tenía un hermano al cual le gustaba y por darle celos a él me volví novia de su hermano, luego me sentí mal porque no lo quería. Él me veía con su hermano y se quedaba normal. Un día nos vio besándonos y dijo ''Perdón si interrumpo, pero José (su hermano) ve a hacer un mandado''. En ese momento pensé que se había puesto celoso, y José se retiró y quedamos él y yo. Nos saludamos y tal y él me dijo ''cómo vas con mi hermano?'' y yo le dije; ''nos queremos, es lo importante, y tú cómo vas con tu novia?'', y me dijo; ''cómo sabes que tengo novia?'', le dije; ''José me comentó...''.

Se quedó pensativo y me dijo;
-José si es chismoso, jaja.
y le dije; está mal que me haya dicho? 
y me dijo; no, todo bien.

Llegó José y me despedí de él y de José porque me retiraba a mi casa.

Estuve toda la noche pensando en eso y al siguiente día decidí terminar con José, porque no estaba bien lo que hacía, no lo quería.

Al siguiente día fui a la casa de José y hablamos, ahí aproveché y le dije que era mejor terminar y cuando iba saliendo de su casa me encontré con su hermano y me saludó diciéndome; Cómo está, cuñi? y le dije; Bien, pero ya no somos cuñados y seguí caminando y él me siguió y me agarró el brazo diciéndome; "Terminaste con José?'' y le dije; 'Sí'. El hermano de José me besó y le cacheteé y le dije; por qué lo haces?, y me respondió; porque tú y yo nos queremos.

Pasaban los días y hablé seriamente con le hermano de José y él me dijo que había terminado con su novia para pedirme que fuéramos novios y yo le dije... ''en serio?'' y me besó y le dije; Stop! y me dijo; ya somos novios.

Correcto e incorrecto?

Hola, me llamo Miguelina y tengo 17 años. 

Mi historia comenzó...

Hace dos años atrás conocí a un chico con el cual me comencé a llevar muy bien, conversábamos todos los días a todas horas. Él y yo nos fuimos volviendo muy íntimos y le iba agarrando cariño. Él tenía novia, pero su novia me caía mal, después de un tiempo me enteré que se dejaron, pero él volvió a tener otra novia. Él me decía que yo le gustaba, pero yo sólo lo tomaba como joda de parte de él. Pasaron los meses y comencé a sentir cosas por él, él me decía que me quería y que le gustaba, y yo fui tomándole confianza para decirle TE QUIERO, pero sentía que le mentía cuando se lo decía y prefería no decírselo. 

Él vivía en otro país, por lo tanto nos conocimos por Facebook. 

Dejamos de hablarnos por un tiempo, y al pasar los meses me enteré que él tenía novia en su país. Una semana después de enterarme de eso él me escribió y volvimos a retomar nuestra amistad.

Sentía celos cuando me contaba de su novia y de que pasaban todo el tiempo juntos. Ya él me gustaba completamente. Él me decía que yo le gustaba aun teniendo novia, y me enojaba por eso. Al pasar unos meses ellos terminaron por un problema el cual desconozco. Él me dijo que si dejaba que él fuera mi novio, pero yo le dije que él no me gusta, que solamente lo quiero mucho y como amigo.

Era muy reciente la terminación de ellos, y por tanto, no me parecía correcto que ya él quisiera tener algo conmigo.

Él siempre ha creído que no me gusta, pero en realidad me gusta, pero tengo miedo, miedo a tener novio porque lo quiero mucho, pero como novio no lo quiero.

Pasaron 2 meses y me enteré que había regresado con su exnovia, yo le pregunté que cuándo habían regresado y me dijo que al mes de ellos terminar, de paso le pregunté que por qué si dice que le gusto él tiene novia y me dijo; no me quieres como novio, sólo como amigo y yo no te quiero como amiga, te quiero como novia, pero como es imposible haré mi vida con alguien más.

Y yo le dije ''Ah... pero sabes que entre tú y yo hay demasiada distancia. Me parece bien que hayas regresado con ella que vive en tu mismo país''. 

Esas fueron nuestras últimas palabras y me retiré, le dije que hablábamos otro día y desde ese día no he sabido más de él, y no sé si hice bien o mal, pero creo estar en lo correcto aunque muchos lo vean incorrecto.