Una niña de 13 años siempre soñaba y anhelaba el día en que conocería a su madre. Desde que nació nunca había vivido con su mamá ésta la había abandonado en una iglesia a los días de nacer. A pesar de lo que su madre le hizo ella quería conocerla porque sentía la necesidad de hacerle muchas preguntas.
La madre biológica de la niña no la quería ver, y sus padres adoptivos tuvieron que decirle eso y la niña dijo: "ella es buena, sé que algún día me querrá".
Le pedía a Dios cada día antes de dormir que le permitiera ver a su madre. Le decía: "no pido mucho, sólo pido verla aunque no me quiera".
La niña se comenzó a enfermar y sus padres adoptivos la llevaron al médico y éste le dijo que la niña presentaba problemas en su corazón. Por eso a la niña le latía muy rápido y se sentía mal. El médico le dijo a sus padres adoptivos que debían cuidarla bien y que no debía hacer trabajos forzosos.
Después de un tiempo, su madre biológica le dijo a los padres adoptivos que quería ver a la niña.
La niña y la madre se conocieron y l niña le dijo que siempre soñaba con ese momento. A los pocos días de conocer a su madre y de empezar a llevarse bien la niña le dijo a su madre que ya podía morir feliz en forma de broma se lo dijo, y a tres días de eso murió de un paro al corazón.
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