Historia de amigas.
Éramos muy amigas desde los 11 años, íbamos a la escuela juntas, era muy comprensiva y siempre nos contábamos todo y nos consolábamos una a la otra, ella nunca quiso conocer a ningún novio que tuviera, y si lo conocía lo insultaba, lo odiaba y criticaba, pero aun así yo la quería bastante, siempre estábamos juntas y la consideraba la hermana que nunca tuve. Ella luego dejó el instituto y se puso a trabajar, igual nos seguíamos viendo todos los días.
El día de su cumpleaños, número 18 salimos a celebrarlo con unos amigos y ya a media noche ella desapareció con un amigo que teníamos en común, ya luego de unos días nos dejamos de ver durante 5 meses, la buscaba y la llamaba, pero ella nunca tenía tiempo, vivía ocupada... Ya después al pasar los meses me llamó para citarme a un lugar y allí hablamos y tal y ahí me confesó que estaba embarazada, es de más decir que quedé sorprendida, y también me confesó que una "amiga" que se había conseguido durante esos meses sin vernos... le consiguió un lugar donde se haría el aborto. Me enojé muchísimo, le grité que no pensaba permitirlo, que ella debería hablar con su madre antes de, ella me dijo que no lo haría y ahí le dije que si ella no lo hacía lo haría yo, porque no pensaba permitir eso y que prefería perderla como amiga a perderla como persona desangrada.
Luego ella asentó cabeza y decidió hablar con su madre y recapacitó sobre su decisión y siguió con el embarazo. Después nació el bebé y se fueron a vivir fuera del país y el padre muy ajeno a esto se enteró por un amigo de ella y para mala suerte era mi jefe y me despidió porque guardé el secreto todo ese tiempo.
Al pasar los años nos reconciliamos él y yo, pudo entender mi situación.
Han pasado muchos años y mi amiga y yo no hemos perdido comunicación, pero como siempre, no ha cambiado nada, prefiere que nos veamos a solas y nunca ha querido conocer a mi marido.
-La amistad tiene un valor muy importante. Valora a la persona que te brinda su amistad sincera, porque esa persona te está dando su tiempo, algo que nunca podrá recuperar.
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